Cuando una pareja acude a un especialista en fertilidad porque tiene problemas para concebir se someterán a diversas pruebas para evaluar el estado de su fertilidad.
Una de ellas es el cariotipo y consiste en estudiar la dotación cromosómica de cada uno de los progenitores. Lo normal sería tener 23 pares de cromosomas. Sin embargo, puede haber alteraciones estructurales o numéricas en los cromosomas que podrían interferir en la fertilidad.
Otra prueba que se puede realizar, en el caso del hombre, sería el FISH de espermatozoides. Para ello, se marcan los cromosomas con sondas fluorescentes y se pueden diagnosticar alteraciones numéricas.
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Por Andrea Rodrigo (embrióloga) y Marta Barranquero Gómez (embrióloga).
Última actualización: 15/05/2023
