El último paso del proceso de fecundación in vitro (FIV) es la transferencia de los embriones al útero materno.
Una vez los embriones se encuentran en el interior del organismo femenino, la actividad de los profesionales en reproducción culmina y el éxito depende únicamente de los propios embriones.
Aunque sea un paso sencillo, corto e indoloro, es fundamental realizar la transferencia correctamente para favorecer la implantación de los embriones y con ello el embarazo.
A continuación tienes un índice con los 3 puntos que vamos a tratar en este artículo.
Número de embriones a transferir
Una de las decisiones más importantes que se deben tomar en relación a la transferencia embrionaria es el número de embriones que vamos a depositar en el útero. La orden 107n del Ministerio de Salud de la Federación de Rusia marca el límite máximo de transferencia en dos embriones.
A pesar del máximo establecido legalmente, si la mujer que recibe el tratamiento desea que se le transfieran tres embriones, podrá solicitarlo a los profesionales de la clínica de fertilidad y éstos actuar siguiendo sus preferencias siempre bajo firma de su consentimiento específico.
El límite en el número de embriones a transferir se establece para conseguir el éxito reproductivo sin aumentar la probabilidad de gestación múltiple, pues este tipo de embarazos resultan más arriesgados tanto para los fetos como para la madre.
La decisión final del número de embriones que van a ser transferidos la tomarán en consenso los especialistas y los futuros padres contemplando diferentes factores como por ejemplo:
- La calidad de los embriones
- Las causas de infertilidad
- La edad de la paciente
- Las características del laboratorio de FIV
- Receptividad endometrial
- El número de embriones viables disponibles
- Efectividad de los sistemas de criopreservación de embriones
En función de aspectos como estos y valorando el balance riesgo-beneficio (riesgo de embarazo múltiple, beneficio en relación al embarazo) se determinará el número de embriones a transferir.
Receptividad endometrial
Para favorecer la implantación y que el tratamiento de FIV resulte exitoso, la cavidad uterina de la mujer debe estar preparada para recibir a los embriones. La transferencia se programará en el momento de mayor receptividad endometrial.
Para conseguir que el endometrio (capa mucosa del útero) esté receptivo y pueda acoger a los embriones, la mujer deberá seguir un tratamiento de preparación endometrial.
Éste consiste en administrar medicación hormonal vía oral, vaginal o en parches para permitir el desarrollo del endometrio. Se irá controlando ecográficamente la evolución uterina y se realizará la transferencia de los embriones cuando el grosor del endometrio sea de entre 7 y 10 mm y presente además un aspecto trilaminar.
Otros factores que se deben tener en cuenta en relación a la transferencia son:
- Día de la transferencia: los embriones son generalmente transferidos en día 2-3 o en día 5-6. Dependiendo de la calidad y cantidad de los embriones, de la preparación endometrial y de la necesidad de realizar técnicas adicionales como el DGP, se procederá a transferir los embriones en un día u otro.
- Embriones en fresco o congelados: se debe decidir también si los embriones se transfieren en fresco o si por el contrario es preferible congelarlos y transferirlos en un ciclo posterior. El método de congelación que se emplea actualmente y que mayores tasas de supervivencia ofrece es la vitrificación embrionaria.
Hacemos un gran esfuerzo para ofrecerte información de máxima calidad.
🙏 Por favor, comparte este artículo si te ha gustado. 💜💜 ¡Nos ayudas a seguir!
Y si a mi me da la gana tener trillizos, ¿no pueden implantarme cuatro o cinco embriones?